miércoles, 11 de noviembre de 2009

Qué paciencia hay que tener...

Para muchas cosas, pero hoy he visto un caso loable de mayor paciencia que la del supuesto Job en una cajera de supermercado.

Ella no me conoce de nada, aunque me ve casi todos los días porque me atiende muchas mañanas cuando voy a comprar el pan con el terremoto. Y hoy este post va para ella porque me ha dejado a cuadros...

Situación: tres personas por delante de nosotros, con cestas poco llenas... estoy entretenida mirando a Mateo y convenciéndole de que no se coma la bolsa del pan, y empiezo a oir un run run... miro, y la señora a la que están cobrando, empieza a liarla porque ofendidísima le dice a la cajera que por qué ya no dan bolsas, que las dan en todos los supermercados (yo ya empiezo en el interior de mi cabeza 'Señoraaaaa! que no ve usté la tele o qué???BOLSA CACA!). Con paciencia, ella le explica acerca de la campaña de Carrefour, que ya se lleva avisando un tiempo, etc. ¿Necesita bolsa?, le pregunta. 'Pues claro, rica, no querrás que lo lleve en la mano, no?'. Cuando le dice que las hay de 5 cts y de 25, por supuesto la Elena Salgado de la tercera edad le dice que una de 5 cts, que son unos miserias todos... y sigue refunfuñando por lo bajinis. El señor que está detrás de ella, para su suerte esta mañana, está sordo como una tapia, y también parece un poco en su mundo. Total que no se da cuenta, ni él ni la arpía, y la chica le pasa la compra de los dos. ¡Nueve euros, nueve euros, como van a ser estas dos cosas nueve euros, por Dios, si es que no queréis más que robar! a estas alturas el siguiente señor (no el sordo) y el que va detrás de mí ya se han dado cuenta de la situación, y unos ríen y otros mascullan que se largue ya, que tenemos prisa. 'Porque esto no es mío, no es mío, no lo ves??' El sordo sigue a lo suyo, la chica anula la cuenta y vuelve a pasarlo todo otra vez. La otra no le quería devolver la bolsa, porque pensaba que se la iban a cobrar dos veces... 'Bueno, y méteme la compra en la bolsa, que en eso va tu obligación!' con unos aires de marquesa de su barrio ... Y la chica con una educación, un saber estar, un no perder los nervios, 'Pues no, señora, no está en mi obligación, pero no obstante yo se lo meto', mientras la otra seguía la retahíla de que son todos unos ladrones y que tal y que cual... ninguno veíamos ya el momento de que se largara por la puerta... Cuando por fin le dice la cantidad de lo suyo, 3, o1 euros, le espeta '¿Seguro? mucho me parece eso a mí pa' lo que llevo' 'Mire señora, no quiere el ticket? Aquí lo tiene,esto más esto es esto', Coño, que lo calcula una máquina, cabrona, vete ya para tu casa! Diosssssssss! Yo lo estaba pasando francamente mal por la chiquilla, me veía en su puesto y tirándome al cuello de semejante esperpenta...

No pude por menos y se lo dije: 'Lo que hay que aguantar, hija mía...'. Y a pesar de que todos nos congraciamos con ella, no creáis que se le ocurrió soltar ni un improperio contra la arpía en ningún momento. Sonrió.

Mucha gente se queja del trato de algunas cajeras... en especial, de una cadena de supermercados concreta, que joer, a veces parece que en la selección de personal piden a propósito ser choni y no haber acabado la ESO... pero yo creo que la mayoría tienen MUCHO MÉRITO. Un trabajo con un horario super esclavo, gran parte del cual tienen que estar de pie, y aguantando chorras y maleducados  (y algún que otro mangui!) por cuatro perras... tendrían que hacerles un monumento!

Una reivindicación: oigan, señores, que ser educado no cuesta un duro, por favor!! y tanto que se quejan de que los jóvenes de ahora no respetan, no tienen modales... los peores ejemplos de malos modos y falta de educación las he visto casi siempre en personas mayores. 'Venerables' ancianit@s, que con eso de que son viejos, joer, parece que hay que tragar con todo lo que se les ocurra, y no puede ser!

Sonia (sé que te llamas Sonia porque lo he oído a tus compañeras y lo pone en mi ticket...): me quito el sombrero.

6 comentarios:

  1. nena, toda la razón!!! mi prima es dependienta del Corte Inglés, y se las tragan así de gordas, especialmente de las señoras mayores, diré en su favor que están mayores y se les ponen encima un montón de manías, tantas como años, pero aguantar debe ser muy duro, y es que estar de cara al público es muy esclavo y tienes que poner buena cara a todas horas y pensar que el cliente siempre tiene razón, claro que en Europa parece más bien que el cliente siempre se equivoca, especialmente en las tiendas buenas que parece que te hacen un favor al atenderte, pero esto me desvía de lo principal, que tienes más razón que un santo y que mi admiración por cajeras y dependientas que aguantan de pie lo que no está escrito... mi prima me cuenta especialmente de las clientas que llegan cinco minutos antes de que cierre el Corte Inglés, y a las que atiendes con al mejor cara pero les clavarías un puñal si pudieras... puf, yo he sido de ésas, pero hasta que ella no me lo contó, no me di cuenta!!! no hay nada como ponerse en los zapatos del otro de vez en cuando, un ejercicio sanísimo...

    POR CIERTO TENEMOS UN HIJO CON EL MISMO NOMBRE!

    ResponderEliminar
  2. jejeje!

    Lo confieso, yo alguna vez también llego super tarde, especialmente ahora, con el nene. Pero sólo si es para algo que sea cosa de poco, si no, me da mucho apuro. Me pongo en el lugar del que ya está deseando recoger para irse a su casa, que su jornada ya está bien, y a mí también me sentaría fatal que me retrasasen. Pero la empatía y el respeto por el trabajo de los demás brillan por su ausencia, en general.

    Así que tú también eres una mama de Mateo?? :) encantada de conocerte, tocaya!

    ResponderEliminar
  3. Me encanta ver las cosas "desde el otro lado".
    Un abrazo!!!

    ResponderEliminar
  4. ¿Desde el otro lado, Ile? ¿Tú también trabajas de cara al público? (perdona mi ignorancia/olvido (si ya me lo habías dicho!) :)))

    ResponderEliminar
  5. GRACIAS!!!!!!! MUCHAS GRACIAS, por prestarme tu tiempo, no me lo merecía.
    (Sonia, la cajera del super)

    ResponderEliminar
  6. Uy que no! y sabes por qué?

    Primero porque me diste una lección de saber estar que yo jamás tendré en la vida.

    Y segundo porque me parece muy bonito que se reconozca a la gente cuando hace bien su trabajo. Jefes, compañeros o clientes están a menudo muy dispuestos a señalarnos lo que hacemos mal, pero qué poco se felicita lo bien hecho. A mi me parece que sube mucho la moral y anima a uno a seguir dando lo mejor en su puesto.

    Gracias por pasarte, Sonia (nos veremos al mediodía ;))

    ResponderEliminar