viernes, 11 de marzo de 2016

Sigo siendo Nerea

Sigo siendo Nerea. Sigo pensando que yo podría ser ella. Y sigo pensando que mis hijos podrían ser los suyos.

Sigo pensando que esto es una injusticia. Y sigo sintiéndome muy mal de comprobar cómo esto le importa nada más que a un valiosísimo (para mi) puñado de personas. Pero bueno, si a la mayoría de la gente no le importa que haya niños a miles muriendo de hambre, frío y neumonía a las puertas de la UE... ¿qué podrá importarles una sola mujer y su hijo, que 'sólo' están separados por una sentencia judicial? 

No, no podemos abarcar toda la miseria del mundo. Pero sí podemos intentar poner nuestro grano de arena en los que nos puedan tocar, por la razón que sea. No hacer nada porque no se puede abarcar todo... en fin, mejor no sigo hablando.

Pienso seguir apoyando a Nerea porque espero que las autoridades penitenciarias se dignen de una vez a revisar su caso y vean que esto es una injusticia, y pueda obtener el indulto o el tercer grado. Me da igual si somos dos, o tres, o catorce, porque la cuestión es que no vamos a abandonar.

Seguimos recogiendo firmas, por si pueden ser de alguna ayuda:


(Imagen tomada de: Público.es)

3 comentarios:

  1. ¡Ánimo, Caro! Sin olvido no hay derrota. La victoria está más cerca. Ojalá pronto puedan intentar recuperar lo que han perdido.

    ResponderEliminar
  2. Como tu muy bien dices, la justicia ha de ser justa y más aún con las personas que no se pueden defender como el bebé de Nerea!
    Desde aquí todo mi apoyo y mis firmas a Nerea

    ResponderEliminar