jueves, 5 de septiembre de 2013

El duelo: un viaje que no sabes cuándo termina

No tenía la expectativa de que esto fuera a durar un tiempo determinado, la verdad. La experiencia de las diferentes mujeres que han sufrido una pérdida (o varias) y de las cuales he estado más cerca, me decía que no era cuestión de días, ni de semanas, y que el proceso, cómo no, es distinto en cada persona.

Han pasado ya casi cuatro meses... y siento la necesidad de escribir esto por varios motivos.

Han pasado cuatro meses, y no estoy bien. Tengo días buenos, pero también tengo días horribles.

Cuando ocurrió todo, y cuando lo conté, siento que estaba inmersa en el proceso, y que vivir la pérdida de una forma fisiológica me dio una fuerza y una claridad de ideas inequívoca. Pero mi error entonces fue pensar que, como me parecía que lo había 'encajado' bien, el duelo no sería un proceso farragoso. Repito, me equivoqué. Supongo que fue tanto como asumir que una mujer que de a luz de forma natural no va a tener depresión posparto. Una memez. Y necesitaba decirlo en voz alta para que nadie se crea que por tener una buena experiencia en cuanto a lo meramente físico en una pérdida, está todo hecho. Ni mucho menos.

Mi recuperación física fue espectacular. Pero el 'puerperio vacío' me devolvió todos los miedos que mis pequeños habían conseguido alejar y otros pocos más, y ahí andamos, viendo quién gana la batalla. De momento, ganan ellos.

Otro motivo para escribir esto son dos necesidades: la de pedir perdón por mis muchos silencios, o ausencias que hay quien no pueda comprender, y sobre todo, la de agradecer (porque creo que no lo hago lo suficiente) a las personas que más me han ayudado en este tiempo. A las personas que no han dado por sentado que YA han pasado cuatro meses y debo estar fenomenal; a esas personas, las mismas, que cuando me ven, o hablamos, y me abrazan, se atreven a mirarme a los ojos y preguntarme 'Y tú? Cómo estás TÚ?', y la emoción me embarga hasta las lágrimas, de lo cerca que les siento de mi corazón.

Son muy pocas personas, pero si leen esto, y creo que lo harán, necesito deciros, aquí, en mi lugar de desahogo, GRACIAS, y OS QUIERO MUCHO. Ojalá hubiera más personas como vosotr@s en este mundo. Uno se da cuenta que no son personas al azar, son personas que tienen en común dos cosas: quererte mucho, y comprender, por haber vivido en carne propia o muy cerca, lo que es esto. Ojalá pueda devolveros siempre a razón de lo recibido.



16 comentarios:

  1. Ay nena me alegra volver a saber de ti pero me entristecen tus palabras, es tan duro....
    Creo que ya te lo dije pero por sí acaso vuelvo a hacerlo porque es algo muy obvio y simple que a mi me ayudo y fue algo que me dijo mi madre: nunca lo olvidaras, aprenderás a vivir con ello, con la pérdida, con su ausencia, pero le recordarás siempre aunque pasen treinta años.
    Un beso muy fuerte.

    ResponderEliminar
  2. Querida Carolina,

    Has pasado por unos de los procesos más duros y estresantes por los que pueda atravesar una madre en esta vida. Perder a un hijo, en tu caso dos es desgarrador, devastador, recuperarse de ese dolor es un proceso muy largo y complejo que hay que dura tiempo, hasta el momento el que hayamos logrado asumir todo el proceso.
    Date tu tiempo, cada una necesitamos el nuestro.
    Te envío todo mi cariño, un abrazo muy muy fuerte,
    Elena

    ResponderEliminar
  3. Mucho ánimo y mucha fuerza para superar un momento tan duro como este.
    Me entristece

    ResponderEliminar
  4. Te entiendo taaaaanto!! Ya hace mas de dos años que me hicieron un legrado porque mi bebe se "paralizo" como te dijeron tambien. Me duele menos, lo acepto mas! Solo espero que mi utero sane pronto para darle vida a otro ser del amor! Un abrazo Carolina, SE lo que sientes!

    ResponderEliminar
  5. Querida Caro, como bien dices nunca sabemos qué tiempo nos llevará el duelo, ni cómo lo afrontaremos, ni de qué manera iremos asumiendo esa verdad que nos acompañará el resto de nuestra vida. Lo que sí sabemos es que nos sumerge en un universo de emociones y sentimientos, en un universo de amor, amor por esa ausencia. Aepta ese amor, esa necesidad de demostrarlo y agradece a esa lucecita que te acompañará ya siempre el ser capaz de darte cuenta de todo ello. Un beso muy grande. Belén

    ResponderEliminar
  6. Hola Caro, entiendo tu dolor, tu añoranza, tus miedos,.....Mi madre perdió un bebe a las 8 horas de nacer....su tercer hijo, cuando yo tenia 6 años. Y pienso como hubiese sido nuestras vidas con mi hermana y cuanto dolor debieron pasar mis padres, en especial, mi madre.... Necesitas desahogo y te escuchamos porque te queremos, nos importas mucho. Un abrazo fuerte.
    Encarna (Leche Mágica)

    ResponderEliminar
  7. Siento que vacío la palabra de tanto decirla, pero GRACIAS, GRACIAS a todas, de veras... la comprensión, el apoyo y el tacto lo son todo en este trance. Vuestras palabras calientan mi corazón...

    Muchas gracias

    ResponderEliminar
  8. Preciosa:
    http://mimosytetablog.com/el-duelo-es-normal-recaer/
    ♥♥♥

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cuánto bien me hicieron tus palabras, Nohe... :)
      <3 <3 <3
      Gracias

      Eliminar
  9. Respuestas
    1. Y ese abrazo en silencio, también me hace mucho bien :)
      Gracias, Moni

      Eliminar
  10. Me quedo sin palabras. Solo mandarte un abrazo muy grande.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A veces las palabras ayudan, cuando fluyen, y a veces sale mejor un abrazo, Esther :) muchísimas gracias.

      Eliminar
  11. Yo lo perdí el 5 de septiembre y en principio parecia que estaba más entera. Intento estar bien porque tengo un niño de 4 años pero ya me estoy dando cuenta que esto va a ser muy largo.

    A mi tambien me han dicho que aprendere a vivir con ello aunque nunca lo olvide

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cuantísimo lo siento, Marta... compartimos situación, mi Mateo también tiene 4 años... está todo muy reciente. Yo no soy quién para dar consejos porque mira, aún estoy en el mogollón... pero ten muchísima paciencia contigo misma. Te vas a necesitar más que nunca en tu vida. Espero que cuentes con gente querida y cercana en la que apoyarte, pero si quieres algo de una desconocida, no dudes que aquí estoy.

      Un fortísimo abrazo

      Eliminar
  12. Uff! Cuanto te comprendo, Carolina! En mi caso también salieron a flote todas mis debilidades (y yo sin admitir la causa!) Pero mi mejor arma es el olvido e intentar mirar hacia adelante, feliz con lo que tengo y lo que conseguí luego. Justo la semana que viene hará tres años de la noticia de la pérdida (eso sí lo recordaré siempre) y mis miedos siguen a flor de piel (ya resignada a que me acompañen el resto de mis días). Puede que las aguas hayan vuelto a su cauce después de haber gestado y parido nuevamente, y me alivia el sentir que yo ya he cumplido con mi deseo maternal de tener un par de hijos. Fui, en su momento, valiente por insistir de nuevo, miro atrás y no sé de dónde saqué la fuerza (que existe, te lo aseguro!). Escribo esto des de la tranquilidad de quien siente que ya está completa, de quien ha superado para siempre (bueno, nunca se puede decir nunca) la etapa de la gestación para afrontar otra etapa (más cansada pero más agradecida, y no por ello menos cargada de miedos), la de la crianza. Muchos ánimos, cuatro meses es muy poco tiempo, date tiempo para encontrar la fuerza que te traerá una nueva vida (o un par!) dentro de ti. Un abrazo.

    ResponderEliminar